Adimesionalidad de Arquetipos

La verdad era que no sentíamos las manos

Era evidente el afuero de campana que se llevaba

Unían cuerdas de cuello en cuello y sonreían, sonreían hiladamente

Vayámonos más lejos, Abulafia se come las uñas, demanos negras con ojos de mar

Aerójos zumban flores en telaráñico concepto, la realidad se disuelve así como las hojas y los cuentos; Los cuentos de fantasía, aquéllos que cuentan a veces, cuellos de cabeza altanera.

La verdad era que no sentíamos la frente

Era vidente de su propio espiral

Cada oblación caía en orden, el caos simétrico multifloral adimensionalidad del arquetipo.

Vayámonos más lejos, bien cerca del böörde.