Una cualidad que acreciente nuestro ritmo
el portentoso estado de los superlativos llega en bandadas flotantes
Y cuando acabe el día tomaremos las riendas bajo luz plateada
Nos costará un tercer ojo abrir el respiro tonificado
Amo y señor de esclavizados enlaces
Baleando el tormento libera electrificado
Una luz pástica que ansíe despojar nos liberación
Deshoja las capas devueltas a los oídos anárquicos
Devuelta al poder monárquico y cicuta en su santo grial
Y lanzas entrecostillas encontrando un cierto nirvana en lacrimología
Quieres no querer, el martillo en levitación
Una desestructuración en salvado crimen
Las prisiones se abren en moralidad lanzada como fuego atificial vista por inválidos
La condena se procesa y pintan las paredes con sangre de niños vudúista
La orquesta comienza su acto final. Las plagas deforman constituciones débiles
Espíritus igualitarios resquebrajan en suspiros, la base creada dinamita el mundo termita
Un ataque se libra en la gran pantalla, una confrontación en espiral sucede en los vastos interiores
Inerte valida que puede tomar el control a base de ostias y Moral deja la hoja afilada al borde de la razón.
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